viernes, 26 de marzo de 2010

24 DE MARZO 2010. 30 AÑOS DEL ASESINATO DE ROMERO


Estoy recién llegado de El Salvador, donde he participado de los homenajes que se han realizado en recuerdo de Óscar Romero, asesinado hace treinta años por el régimen represor de ese país. A Romero, un obispo inspirador hoy de toda la Teología de la Liberación, le mataron por ponerse de parte de los empobrecidos y denunciar con firmeza a los ricos. De mi visita a El Salvador y a la memoria de este personaje, he sacado una serie de conclusiones respecto a la iglesia acá y la iglesia allá (esa iglesia vaticana y europea de señores mayores que se dedican a silenciar crímenes nauseabundos contra los niños, los más débiles). Paso a reseñarlas como curiosidad:

1) Allá la iglesia rouquista, esa iglesia de castings para jóvenes modernos y de merchandising vaticano, esa iglesia de jornadas mundiales para jóvenes que quieran adorar al jefe de estado del Vaticano, pasea su cruz publicitaria por media Europa y la carga sobre los hombros de los que les deben admiración y respeto (y silencio, nunca críticas). Acá la iglesia camina al lado de tantos crucificados a causa de la injusticia del sistema y carga con ellos su cruz, una cruz que no es de madera sino de hambre, de drogas, de violencia, de guerras y muerte.

2) Allá la iglesia de los roucos y los ratzingers sale a la calle y marcha para evitar que personas del mismo sexo se amen, ya que ellos y no otros son los dueños y señores del amor y tienen la autoridad para decidir quién puede amarse y quién no y cuál es la familia que agrada a Dios y cuál no. Acá la iglesia sale a la calle y marcha para clamar contra tanto atropello, para señalar al rico con el dedo, para luchar con los empobrecidos desde el pueblo.

3) Allá la iglesia de vigilias y misiones vacías (blanqueadas) se siente perseguida por votar al PP. Acá la iglesia está perseguida por su opción por el pobre.

Y para dejar algo más claro de la figura de Romero, para quién no le conozca, os transcribo un poema escrito por Pedro Casaldáliga sobre su persona y ejemplo:

El ángel del Señor anunció en la víspera...

El corazón de El Salvador marcaba 24 de marzo
y de agonía.
Tú ofrecías el Pan,
el Cuerpo Vivo
-el triturado cuerpo de tu Pueblo;
Su derramada Sangre victoriosa
-¡la sangre campesina de tu Pueblo en masacre
que ha de teñir en vinos de alegría la aurora conjurada!

El ángel del Señor anunció en la víspera,
y el Verbo se hizo muerte, otra vez, en tu muerte;
como se hace muerte, cada día, en la carne desnuda de tu Pueblo.

¡Y se hizo vida nueva
en nuestra vieja Iglesia!

Estamos otra vez en pie de testimonio,
¡San Romero de América, pastor y mártir nuestro!
Romero de la paz casi imposible en esta tierra en guerra.
Romero en flor morada de la esperanza incólume de todo el Continente.
Romero de la Pascua Latinoamericana.
Pobre pastor glorioso, asesinado a sueldo, a dólar, a divisa.

Como Jesús, por orden del Imperio.
¡Pobre pastor glorioso,
abandonado
por tus propios hermanos de báculo y de Mesa...!
(Las curias no podían entenderte:
ninguna sinagoga bien montada puede entender a Cristo).

Tu pobrería sí te acompañaba,
en desespero fiel,
pasto y rebaño, a un tiempo, de tu misión profética.
El Pueblo te hizo santo.
La hora de tu Pueblo te consagró en el kairós.
Los pobres te enseñaron a leer el Evangelio.

Como un hermano herido por tanta muerte hermana,
tú sabías llorar, solo, en el Huerto.
Sabías tener miedo, como un hombre en combate.
¡Pero sabías dar a tu palabra, libre, su timbre de campana!

Y supiste beber el doble cáliz del Altar y del Pueblo,
con una sola mano consagrada al servicio.
América Latina ya te ha puesto en su gloria de Bernini
en la espuma aureola de sus mares,
en el dosel airado de los Andes alertos,
en la canción de todos sus caminos,
en el calvario nuevo de todas sus prisiones,
de todas sus trincheras,
de todos sus altares...
¡En el ara segura del corazón insomne de sus hijos!

San Romero de América, pastor y mártir nuestro:
¡nadie hará callar tu última homilía!

5 comentarios:

  1. Bueno otra noche de Max Estrella , sin quitarnos el cráneo por dios esto no es lo que era un bexo de queso

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  2. Y este fin de semana volvera a decir, Padre perdonalos por que SI saben lo que hacen.
    Un beso hijo.

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  3. Si señor, el otro dia me estuve escuchando un documental radiofonico por internet (al que me he hecho bastante adicto) sobre la vida y muerte de Monseñor Romero. Te dejo el link por si por algun casual, entre tanto lio en el que estás metido, te da tiempo a escucharlo.
    http://www.rtve.es/podcast/radio-nacional/documentos-rne/

    Haces que nuestras ocupaciones parezcan de broma. Bendita paradoja.
    Por cierto, mis alumnos ya saben quien eres :)
    Un abrazo, hermano, animo y fuerza.

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  4. Si la iglesia “aca” (como dices ahora) fuera como la de “alla” hasta yo me haría “atea clerical”… De esto ni una palabra a mi madre.
    Un beso fuerte!!!

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